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                  Somos una asociación civil sin fines de lucro nacida en la ciudad de Santiago del Estero en diciembre del año 2016 gracias a la iniciativa de las músicas santiagueñas Cecilia Nazar Luna y Carolina Haick. Esta formada por un grupo de destacadas artistas, cantantes, instrumentistas, arregladoras y compositoras que luchan por lograr el reconocimiento de la música de las mujeres haciéndola visible y enriqueciendo con su obra la cultura universal.

MISIÓN

                  La misión de nuestra Asociación es promover la conciencia, la igualdad, la diversidad, el patrimonio y las oportunidades de las mujeres en la música a través de la educación, el apoyo, el empoderamiento y el reconocimiento.

DOCUMENTO FUNDACIONAL

                  La Asociación Civil Música de Mujeres nace con la misión de promover la conciencia, la igualdad, la diversidad, el patrimonio y las oportunidades de las mujeres en la música a través de la educación, el apoyo, el empoderamiento y el reconocimiento.

                  Está formado por un grupo de destacadas artistas, cantantes, instrumentistas, arregladoras y compositoras que luchan por lograr el reconocimiento de la música de mujeres haciéndola visible y enriqueciendo con su obra la cultura universal.

                  Definimos la construcción de este movimiento con el compromiso en la búsqueda de relaciones positivas y de alianza con otras mujeres para lograr el poderío genérico de todas y el empoderamiento vital de cada mujer. En tal sentido adherimos al concepto de “sororidad”, el cual es definido por la antropóloga Marcela Lagarde, como la “hermandad, confianza, fidelidad, apoyo y reconocimiento entre mujeres para construir un mundo diferente”; con el fin de posibilitar la eliminación de la idea de enemistad histórica entre mujeres y la solidaridad nacida de la conciencia femenina de su discriminación dentro del orden patriarcal.

                  Entendemos que durante los últimos años, el tema sobre la igualdad de género ha llamado la atención en los medios, y el público parece estar más sensibilizado al respecto. Esto es un reflejo del acelerado incremento de conocimiento sobre la discriminación que afecta a las mujeres en todas las áreas de creación artística. Dentro de los sectores artísticos y culturales, la fuerte presencia y la excelencia de mujeres generadoras de proyectos musicales no impide que se produzca un “efecto techo de vidrio”. Las estadísticas de mujeres en festivales y eventos culturales en nuestra provincia son alarmantes ya que en el mejor de los casos solo hay un 10% de presencia femenina en los mismos.

                  Esta batalla por la igualdad entre hombres y mujeres en la música es fundamental para la sociedad en general. ¿No es algo curioso que en un sector de la actividad humana que promueve la emancipación, la apertura y la crítica, la representación femenina sea inferior a la representación en el mercado laboral a nivel global? ¿Las mujeres que se dedican a una carrera artística están destinadas a ser únicamente musas, objetos de deseo, colaboradoras, tan dedicadas como invisibles?

                  Creemos que ha llegado el tiempo de reflexionar sobre los estereotipos de toda naturaleza que se nos han impuesto por parte de la sociedad patriarcal.

Nos definimos, nos identificamos desde nuestros discursos femeninos de identidad, desde la individualidad y desde nuestras consciencia de seres únicos.

                  Por último, asumimos, honramos y valoramos positivamente lo logrado hasta ahora en contextos, la mayoría de las veces, de extrema dificultad. Por ello, trabajamos desde y por la memoria histórica, reivindicando a las mujeres trabajadoras de la música que nos han precedido, las que con su voz, intelecto o arte, han luchado por un mundo limpio, justo e igualitario.

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